El 9 de abril, el Parlamento ucraniano aprobó cuatro proyectos legislativos presentados por el Gobierno que prohíben todos los símbolos y propaganda del comunismo. Con su entrada en vigor, todo monumento a las figuras comunistas que no hayan sido destruidos en los últimos meses por los matones fascistas tendrán que ser demolidos. Toda ciudad y calle nombrada en honor a los comunistas también tendrá que ser renombrada.
Para justificar esta legislación, los partidos del Gobierno han recurrido al truco de equiparar comunismo y nazismo. Así, el preámbulo afirma: “El proyecto de ley busca condenar los regímenes totalitarios comunista y nacional-socialista (Nazi) a nivel legislativo, implementar la prohibición de la negación pública de la naturaleza criminal de los regímenes totalitarios, prohibir el uso público de los símbolos y propaganda, introducir la obligación del Estado de llevar a cabo una investigación y divulgación de los crímenes cometidos por los miembros de esos regímenes totalitarios para prevenir la repetición de dichos crímenes en el futuro, eliminar amenazas a la soberanía, integridad territorial y seguridad nacional de Ucrania, así como por la justicia histórica”.
La ley menciona específicamente la “producción”, “divulgación” o “uso público” de símbolos de esos “regímenes totalitarios”. La lista de artículos prohibidos incluye la bandera y el himno soviético, así como monumentos o placas históricas en conmemoración de los líderes comunistas. Las penas por violar esta ley están entre cinco y diez años de cárcel. La legislación antipropaganda especifica que se refiere a los símbolos comunistas entre 1917 y 1991. El proyecto exige renombrar “barrios, parques, bulevares, calles, callejones, accesos, avenidas, plazas, puentes u otros objetos y localidades cuyos nombres contengan símbolos totalitarios comunistas”.
Por supuesto, la condena del nazismo es una farsa, ya que en la misma sesión, la Rada aprobó la ley “Sobre el estatus legal y conmemoración de los luchadores por la independencia de Ucrania en el siglo XX”. La ley incluye docenas de organizaciones que son reconocidas como luchadores por la libertad, incluyendo aquellas organizaciones como la Organización de Ucranianos Nacionalistas (OUN) o el Ejército Insurgente Ucraniano (UPA), que colaboraron con los nazis y son culpables de masacres de judíos, polacos y otros. Sus símbolos son ampliamente utilizados por las organizaciones de extrema derecha y grupos paramilitares fascistas que son parte del aparato del Estado.
De hecho, hace tan solo unos días, el líder del Praviy Sector, Dmitro Yarosh, que se ve a sí mismo como heredero de la tradición del colaboracionista Stepan Bandera y sus organizaciones OUN-UPA, fue nombrado asesor del jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas.
A partir de ahora, los símbolos de estas organizaciones genocidas que colaboraron con los nazis están protegidas por la ley: “La negación pública de la legitimidad de la lucha por la independencia en Ucrania en el siglo XX es un insulto reconocido a la memoria de los luchadores por la independencia de Ucrania en el siglo XX que constituye una denigración del pueblo ucraniano y es ilegal”.
Otra organización que se menciona específicamente en la ley es el Hetmanato, una dictadura antisocialista apoyada por Alemania que existió brevemente en 1918. Con ello, la reescritura de la historia por los actuales patriotas ucranianos llega al absurdo. El Hetmanato existió únicamente por el apoyo alemán y austro-húngaro. Los altos cargos del Estado Mayor de sus fuerzas armadas estaba formado por antiguos oficiales del Ejército Imperial Ruso derrotados por los Bolcheviques y ucranianos de diferentes posiciones políticas conformaban la amplia oposición al Hetmanato. Que dicha organización pueda ser considerada como parte de “la lucha por la independencia de Ucrania” claramente demuestra que lo que se está legitimando y protegiendo es el anticomunismo y antisocialismo.
Para colmo, estas nuevas leyes también degradan la celebración del 9 de mayo como Día de la Victoria creando un adicional Día del Recuerdo y la Reconciliación en Ucrania el 8 de mayo para “conmemorar a todas las víctimas de la Segunda Guerra Mundial”. Presumiblemente, esto quiere decir celebrar a todos lo que murieron luchando del lado de los nazis. El término Gran Guerra Patriótica ya no será oficialmente utilizado.
El Día de la Victoria seguirá celebrándose, pero los actos de recuerdo no deben incluir, según esta ley, ningún símbolo soviético. Ya que la Unión Soviética jugó un papel decisivo en la derrota del nazismo, la pregunta es cuál será el significado de la celebración si todos los símbolos soviéticos están prohibidos.
La ley contra los símbolos comunistas fue propuesta por el Partido Radical, de extrema derecha, de Oleh Lyashko y fue aprobada con los votos de 254 diputados. Eran necesarios 226 votos para ser aprobada.
La aprobación de estas leyes se produce en un momento en que se trata de ilegalizar el Partido Comunista y en vísperas de la celebración del 70 aniversario del Día de la Victoria, cuando la Alemania nazi capituló ante la Unión Soviética.
Fuente: Slavyangrad.es
Artículo original en: Solidarity with the Antifascist Resistance in Ukraine
- Будь в курсе последних новостей и интересных статей, подписывайся на наш канал «NovorossiaToday»
- Be aware of the current events and interesting articles, subscribe to our channel «NovorossiaToday»
- Pour ne rien manquer de la derniere actualite et des articles interessants, suis notre chaine Telegram en direct«NovorossiaToday»